La industria del juguete global atraviesa un giro inesperado: no son los niños pequeños quienes la mantienen a flote, sino los adultos que conservan su deseo de jugar. Según un informe reciente de Circana, las personas mayores de 18 años —los llamados “kidults”— generaron ingresos de 1.500 millones de dólares en tan solo el cuarto trimestre de 2024.

Ese segmento ahora representa aproximadamente el 28 % de las ventas globales de juguetes, superando en importancia al tradicional mercado infantil. Frente a un contexto de natalidad baja y creciente competencia de otras formas de entretenimiento, como videojuegos, los fabricantes y marcas han reconfigurado su oferta — juguetes de colección, sets de construcción complejos, figuras de fans adultos — para atraer a este nuevo consumidor.

El cambio de perfil del comprador exige al sector adaptarse: el mercado global de juguetes, que en 2023 rondaba los 111 mil millones de dólares, proyecta un crecimiento constante hacia 2032–2035. En ese contexto, los “niños de corazón” están salvando una industria que parecía enfrentar un estancamiento.

Este fenómeno evidencia cómo el juguete ya no es solo cosa de infantes: el deseo de jugar y coleccionar trasciende la edad y redefine el mercado mundial.

Fuente: morningbrew.com