
Nota publicada: 2025-10-14
El secretario de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, Jesús Esteva, informó que aún 155 localidades permanecen incomunicadas como consecuencia de los daños severos provocados por intensas lluvias en cinco entidades del país.
En Veracruz, por ejemplo, todavía hay 57 comunidades sin acceso.
De las 132 carreteras federales que resultaron afectadas, 130 ya se han reabierto total o parcialmente, aunque en muchos casos solo un carril.
En cuanto a las 352 carreteras estatales afectadas, 144 aún no han sido reabiertas.
La secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel, dijo que se está realizando un censo de viviendas y comercios afectados, con especial esfuerzo en Poza Rica, donde se desplazaron 800 servidores para agilizar la entrega de apoyos. Hasta ahora hay 30 municipios en las cinco entidades con daños importantes. Montiel pidió a la población que, si les es posible, comiencen labores de limpieza y documenten los daños con fotografías para facilitar la validación cuando lleguen los funcionarios responsables.
Respecto al restablecimiento del suministro eléctrico, la directora de la Comisión Federal de Electricidad informó que se ha recuperado el servicio en 91 % de las comunidades afectadas. Más de 18 mil usuarios fueron reconectados. En contraste, el acceso en muchas zonas aún es complicado debido al deterioro de caminos.
Para agilizar los trabajos de reapertura de vías, se ha reforzado el traslado de maquinaria pesada desde dependencias federales y estatales hacia los estados más afectados: Veracruz, Puebla, Hidalgo, Querétaro y San Luis Potosí. Hidalgo es el estado con mayor número de localidades aisladas, por lo que se ordenó el envío de 11 helicópteros adicionales para establecer puentes aéreos y trasladar víveres y apoyo.
Mientras tanto, el secretario de Salud anunció que 471 brigadas médicas serán desplegadas en los cinco estados afectados para atender comunidades incomunicadas, reforzar la vacunación y prevenir enfermedades transmitidas por vectores, como el dengue, que puede aumentar tras el desastre.
Aunque se han hecho esfuerzos significativos, la situación sigue siendo crítica. Las lluvias han dejado una fractura estructural en caminos rurales y estatales, lo que dificulta la distribución de ayuda y la comunicación de cientos de comunidades afectadas.