Nota publicada: 2025-08-10

Todos, incluido tú, nacemos para ser sanos, felices y ricos. De verdad lo creo, y por eso encuentras esta premisa entretejida en todo mi trabajo. En enero, comienzo una nueva cohorte en mi programa Breakthrough U. Así que, durante los últimos meses, he estado trabajando en cuantificar cómo se desarrolla una vida verdaderamente próspera. Me sumergí profundamente en el proceso que impulsó mi propia y notable trayectoria, desde la cárcel en mi adolescencia hasta convertirme en un emprendedor inspirador.

Como sabes, una vida abundante nunca puede basarse solo en dinero y bienes materiales; sin embargo, estos son parte esencial de la ecuación. Para comprender la realidad, necesitas principios básicos, conceptos innovadores, verdades innegables y despertares espirituales.

Hacerse rico no se trata realmente de ganar más dinero, como la mayoría de la gente cree. Yo diría que pasar de la ruina a la riqueza se trata más bien de una transformación profunda: reconfigurar tu forma de pensar, explorar tus emociones en torno al dinero y luego desmantelar cualquier creencia negativa o limitante que te frene.

Ese es el primer paso para que dejes de perseguir el dinero y empieces a manifestar prosperidad holística en cada área de tu vida. Creo que una vida verdaderamente abundante se define por siete elementos:

Haz un trabajo que te ilumine.Colabora únicamente con personas que compartan tu pasión desenfrenada por el trabajo.Operar al máximo nivel de energía y bienestar.Disfrute de relaciones saludables, positivas y edificantes.Dejemos de lado el asunto del dinero.Busca cada día avanzar hacia la versión más alta posible de ti mismo.Haz la transición del éxito a la trascendencia.

En la próxima publicación, analizaremos por qué creo que los siete elementos son necesarios y algunas de las preguntas e inquietudes más frecuentes. Hasta entonces, me encantaría que compartieras tu opinión a continuación.

Paz,

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-RG