Nota publicada: 2025-11-10
Santa Marta., La cumbre entre la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y la Unión Europea (UE) condenó este domingo el “uso de la fuerza” en contravía al derecho internacional, en medio de tensiones con Estados Unidos por los ataques aéreos a embarcaciones en el Caribe y el Pacífico, pero sin hacer mención explícita a esa ofensiva del gobierno de Donald Trump.
Tras 12 horas de deliberaciones la mención más cercana al asedio estadunidense contra las pequeñas embarcaciones y Venezuela se puede resumir en el punto ocho de la misma: “Reiteramos nuestra oposición al uso de la fuerza y a cualquier acción que no sea conforme con el derecho internacional y la Carta de Naciones Unidas”.
La declaración conjunta de la Celac y la UE contiene 52 puntos, la mayoría dedicados al respeto de los derechos humanos, la autodeterminación y el respeto al derecho internacional como patrón de respeto y unidad entre las naciones. Países como Argentina y Paraguay se “desasociaron” de varios puntos de la declaración.
Venezuela no acogió, en su totalidad, la declaración conjunta.
Aunque el tema de los ataques de Estados Unidos estuvo en discusión, no hubo consenso para incluirlo en la declaración final, pues el contenido de las resoluciones en la Celac se definen por unanimidad consensuada.
Tanto el presidente colombiano, Gustavo Petro, como su par de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, previamente expresaron la necesidad de que de esta cumbre saliera un pronunciamiento de rechazo al gobierno de Estados Unidos.
Fuentes consultadas confirmaron que el tema no pasó desapercibido en la cumbre, pues Lula lo había dicho días antes:
“Aquí (en la Celac) esperamos que se pueda dar un espacio en el que se hable de los ataques que se han realizado desde Estados Unidos, afectando a los pescadores del Caribe y el Pacífico”.
Resaltan el diálogo entre iguales
Petro destacó que en la declaración se subraya la “unidad de los pueblos, el respeto a los derechos humanos, el fortalecimiento de la autodeterminación y el diálogo entre iguales, como dique de contención a la ola del gran capitalismo que amenaza la democracia”.
La declaración conjunta fue leída por el anfitrión Gustavo Petro, presidente protempore de la Celac; Antonio Costa, presidente del Consejo Europeo; y Kaja Kallas, vicepresidenta de la Comisión Europea, quien anteriormente declaró que “sólo se puede recurrir a la fuerza por dos motivos, ya sea en defensa propia o en virtud de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU”.
“España está y seguirá estando al lado de América Latina y el Caribe”, comentó a la prensa, desde lejos, sin acercarse al micrófono, Pedro Sánchez, presidente de gobierno de ese país.
Bajo la égida de la incertidumbre por los constantes bombardeos del gobierno de Trump, concluyó esta cuarta cumbre Celac-UE que, pese a la ausencia de un pronunciamiento contra la Casa Blanca, el presidente anfitrión, Gustavo Petro, la consideró un éxito, no obstante, los esfuerzos del secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, por sabotearla, según lo denunció el mandatario colombiano.