Nota publicada: 2025-08-15
El analista Fred Krueger ha señalado que un estándar basado en bitcoin (BTC) podría obligar a los gobiernos a mantener presupuestos equilibrados, generando múltiples beneficios económicos.
Desde su perspectiva, una adopción más amplia de bitcoin podría limitar el financiamiento de conflictos bélicos, recortar gastos en programas gubernamentales ineficientes, reducir la intervención del Estado en la economía, controlar la inflación y brindar mayor previsibilidad al entorno financiero.
La historia económica ofrece varios ejemplos de los riesgos de un sistema monetario sin límites. Cuando los gobiernos pueden imprimir dinero sin restricciones, el gasto público tiende a crecer rápidamente, lo que genera déficits fiscales y presiones inflacionarias. Un caso emblemático es la experiencia de EE. UU. durante la Guerra de Vietnam (1955-1975).
Y es que, en aquel conflicto, Estados Unidos asumió un gasto enorme para financiar las operaciones militares, que ajustado por inflación actual supera el billón de dólares. Al mismo tiempo, la administración de Lyndon B. Johnson implementó ambiciosos programas sociales, lo que incrementó aún más el gasto público.
Para financiar estos compromisos sin elevar significativamente los impuestos, el gobierno recurrió a déficits fiscales cada vez mayores, y la Reserva Federal (Fed) incrementó la oferta monetaria, es decir, imprimió dinero. Esto fue posible porque, en ese entonces, el dólar estaba parcialmente respaldado por el patrón oro bajo el sistema de Bretton Woods, aunque existía cierta flexibilidad para emitir moneda.
Es precisamente para evitar escenarios como el de Vietnam que el principio de escasez de bitcoin resulta relevante. A diferencia del dinero fíat, que los gobiernos pueden emitir casi sin límites, BTC tiene un suministro máximo definido —solo se crearán 21 millones de unidades—.
Esta característica limitaría la capacidad del Estado de financiar déficits mediante la impresión de dinero, obligando a las autoridades a priorizar el gasto y mantener un equilibrio fiscal, al tiempo que ofrece mayor estabilidad y previsibilidad a la economía.
El papel de bitcoin en la estabilidad macroeconómica y fiscalOtro ejemplo que refuerza la perspectiva de Krueger es la situación actual de la deuda estadounidense. En 2025, la deuda nacional bruta de EE.?UU. superó los 37 billones de dólares, equivalente a más del 120% del PIB, un nivel comparable al de la posguerra, pero en un contexto de relativa estabilidad económica.
Lo cierto es que, según medios estadounidenses, en la última década el país ha incrementado su deuda en aproximadamente un billón de dólares cada cinco meses. Este crecimiento acelerado refleja déficits fiscales persistentes y un gasto masivo, especialmente durante la pandemia de COVID-19.
Ante esta situación, referentes de la industria de las criptomonedas, como Michael Saylor, CEO de Strategy, coinciden en que bitcoin podría desempeñar un papel clave en la estabilidad financiera de EE.?UU. Como reportó CriptoNoticias, Saylor propuso que el país adquiera una porción significativa de todos los BTC en circulación, con el objetivo, entre otros, de enfrentar los desafíos derivados de la elevada deuda nacional.
La visión de Krueger y la perspectiva de Saylor apuntan a un sistema en el que la escasez programada de bitcoin incentive la responsabilidad fiscal, limite el gasto innecesario y ofrezca un marco más estable y predecible para la economía. Aunque la implementación de un estándar así requeriría tiempo y reformas significativas, bitcoin no ha dejado de conquistar hitos que hace unos años se creían impensables. El tiempo hablará.