Corren Rumores

Los fotógrafos, clase aparte

Hilario Olea

EL MEMO Y LOS 70 AÑOS…Aprovechando el escenario de las Fiestas del Pitic se montará la Ruta del Arte con exposiciones de diferentes tipos en 16 puntos de la ciudad. En este escenario se rendirá un muy reconocido homenaje al legendario fotógrafo Guillermo Moreno, con el tema “70 años en esto de la fotografía”.  Un homenaje muy reconocido porque si alguien está relacionado con la cámara es  el Memo, quien no solo es una leyenda del lente sino que deja un enorme legado con imágenes que han dado vuelta al mundo, como la del danzante yaqui tomada en la orilla del mar y teniendo como fondo el sol. Si no me equivoco esta foto estuvo en los cachitos de la Lotería y llegó hasta el propio Vaticano.  Hay que darse la vuelta para reconocer a este maestro de la cámara.

LA VIEJA GUARDIA… Este homenaje me obligó a hacer recuerdo de todos los amigos y compañeros de la cámara con los que trabajamos juntos desde hace 50 años. Fotógrafos que fueron verdaderas leyendas en todo sentido.  Recordamos por ejemplo a Gonzalo Blancarte, quien era un fotógrafo y periodista al mismo tiempo. Nos platicaba que en la campaña de Bienbrich tenían que revelar las fotos improvisando un cuarto oscuro con una mesa la que cubrían con una cobija y ahí sin luz a puro colmillo revelaban los rollos. Además, como columnista tenía un humor y veneno único. Como cuando escribió que Enguerrando Tapia era chivo. ¡Qué!, se preguntaron todos.  Luego con el toque de humor dijo que era chivo porque había nacido en a Chivatera en Cananea. Lo vi cubrir un motín en el Cereso como si fuera aprendiz, pues le entró a todo.

LA TROPA CON LENTE…Caray, pidiendo perdón por los que se me vayan quedar fuera, recordamos a familias de fotógrafos.  Ahí están los Dávila,  con Ernesto el Negro, que a la fecha sigue igualito.  El tremendo Sergio que imitaba a Echeverría igualito.  Por cierto, en ese tiempo no se usaba lentes de telefoto y cuando cubría el béisbol se ponía a un lado de la tercera y les soltaba el flashazo a los corredores. Uno de ellos quedó cegado y agarró para el dugout en lugar de home.  Otra buena del Chiquilín fue cuando cubrió un enfrentamiento a tiros con guerrilleros de la 23 de Septiembre. Se levantaba y tomaba la foto. Pero fue hasta que reveló las imágenes que se dio cuenta que el guerrillero le estaba disparando a él. Casi se orinaba. Otra familia de fotógrafos fueron los Félix con el Chico y el Güerito.  También con ellos varias anécdotas que les quedo pendientes.

OTROS ATRABANCADOS…Dos fotógrafos que eran atrevidos y atrabancados fueron Rolando Paredes, con quien hacíamos equipo para cubrir los eventos donde había violencia.  Ya nos tenían tomada la medida porque sabían que iríamos a todo. Rolando en ocasiones se fajaba una pistola por lo que pudiera ofrecerse. El otro sin lugar a dudas uno de los grandes de la lente fue el tremendo Crispín Ballesteros.  No había nada que lo detuviera.  Además  tenía olfato para las mejores fotos, como la mejor imagen del Mundial de Futbol con el gol de Negrete. Luego tuvo la suerte de tomar fotos de la gira del Papa cuando cambiaron ruta y de casualidad ahí estaba el Crispín..  Era no solo audaz sino temerario, por eso fue uno de los mejores fotógrafos, que deberían recuperar su trabajo porque  hay fotos increíbles.

LA PAREJA PERFECTA…Hay  que reconocer que ahora cualquiera es fotógrafo con un celular, pero en ese tiempo que les hablo teníamos que ser acompañados con alguien que supiera tomar fotos, no solo en blanco y negro sino en color que era lo más difícil. Tenemos un bonche de anécdotas, como la que nos pasó con el Lupillo Languré, cuando cubrimos una gira de López Portillo que iba a inaugurar un fraccionamiento del Fovissste. Cuando venía la comitiva intenté subir al Lupillo al techo de una casa sin mirar hacia arriba. De repente comenzó a gritar ¡Bájame, bájame!. Al voltear vi que un militar le tenía puesto el rifle en la frente.  Por poco y se orina. Claro, lo baje y a correr se ha dicho.  En fin, me quedan muchos amigos por fuera y todos ellos de lo mejor, que deben estar en el Salón de la Fama de la Fotografía. Esperemos que alguien tenga la iniciativa para crearlo.  A todos nuestros amigos de la cámaras, tremendo recuerdo porque me faltaron un montón.  Y felicidades a Memo Moreno por su reconocimiento.

En fin, como dijo el Chapito Rodríguez, el que tiró la primera piedra es que tenía menos pecados.

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