Jerusalén. Israel aliviará el bloqueo y permitirá el ingreso de cantidades limitadas de alimentos a Gaza, informó ayer la oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu, después de que su ejército anunció que empezó extensas operaciones terrestres en las partes norte y sur del enclave, al recrudecer la operación Carros de Gedeón.
Ante la creciente presión por el bloqueo de ayuda que impuso el 2 de marzo y el riesgo de hambruna, Israel intensificó su feroz campaña militar en Gaza, donde funcionarios de salud palestinos dijeron que cientos de personas han muerto en ataques durante la última semana, de los cuales 140 ocurrieron la pasada noche.
Por recomendación de las Fuerzas de Defensa de Israel y debido a la necesidad operativa de permitir la expansión de los intensos combates para derrotar a Hamas, Israel permitirá una cantidad básica de alimentos para la población a fin de garantizar que no se desarrolle una crisis de hambre en la franja de Gaza, informó la oficina de Netanyahu.
No precisó cuál es la cantidad básica de alimentos, y añadió que Hamas no controlará la distribución de la ayuda ni sus integrantes tendrán acceso a los suministros.
Tampoco quedó claro cuándo llegará la ayuda a Gaza ni cómo.
La nueva fase de la incursión israelí se conoció después de que ambas partes dijeron que no se lograron avances en una nueva ronda de conversaciones indirectas en Qatar.
Netanyahu declaró que en las negociaciones se abordó la posibilidad de una tregua y la liberación de rehenes, así como poner fin a la guerra a cambio del exilio de los militantes de Hamas y la desmilitarización del enclave, términos que el movimiento de resistencia islámica ha rechazado con anterioridad.
Las propuestas planteadas en Doha son inaceptables y la posición de Israel permanece sin cambios, quieren liberar a los prisioneros (rehenes) sin un compromiso de poner fin a la guerra, advirtió un funcionario de Hamas a la agencia Reuters.
El grupo armado mantiene su propuesta de liberar a los rehenes a cambio del fin de la guerra, la retirada de las tropas israelíes, el fin del bloqueo a la ayuda a Gaza y la liberación de los prisioneros palestinos.
El ejército israelí afirmó que llevó a cabo una oleada preliminar de ataques contra más de 670 objetivos durante la última semana en apoyo a Carros de Gedeón, su nueva operación terrestre destinada a tomar el control de partes del enclave y que ampliará al norte y sur de la franja. Añadió que eliminó a decenas de combatientes de Hamas.
El ministerio gazatí de Salud manifestó que sólo la semana pasada fueron asesinados 464 palestinos, con lo que asciende a 53 mil 300, la mayoría civiles, la cifra de muertos desde que comenzó la guerra, en octubre de 2023.
Familias completas fueron borradas del registro civil por los bombardeos israelíes durante la noche, contó vía telefónica a Reuters Khalil al Deqran, portavoz del ministerio de Salud de Gaza.
Entre jueves y sábado 65 mil 534 personas fueron expulsadas de sus hogares en Jabaliya y Tel Zaatar, donde el ejército israelí lanzó folletos el viernes con el aviso a los residentes a evacuar, informó el periódico israelí Haaretz.
En tanto, el director general de hospitales en Gaza, Muhammad Zaqout, denunció que tropas de Israel asesinan a los heridos impidiéndoles llegar a los hospitales y atacan a los pacientes y personal médico dentro de las instalaciones de salud palestinas, reportó Al Jazeera.
En ese contexto, el último nosocomio activo en el norte de Gaza, el Hospital Indonesio de Beit Lahia suspendió operaciones por el asedio israelí contra sus instalaciones.
Hamas condenó, por otro lado, el asesinato de cinco periodistas más en la franja, con lo que suman 209 los comunicadores abatidos desde que comenzó la guerra, mientras la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Medio Oriente denunció que más de 300 de sus trabajadores han muerto en ataques de Israel