Brasilia. El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó ayer que comunicó a los líderes, tanto de Venezuela como de Estados Unidos, que está dispuesto a ayudar para evitar una confrontación armada en Latinoamérica.
Lula se mostró dispuesto a mediar entre las partes para alcanzar “una solución pacífica”, y agregó que “posiblemente” hablará con su homólogo estadunidense, Donald Trump, “antes de Navidad” para evitar una “guerra fratricida”.
Cuba, por su parte, condenó la decisión de Estados Unidos de imponer un bloqueo naval contra la república bolivariana con el fin de impedir el libre comercio de hidrocarburos, que tendría un impacto directo en la isla, advirtió la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento).
Agregó que la medida “constituye una gravísima violación al derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas, a la vez que quebranta la paz en la región”.
Rechazó el “acto de piratería y terrorismo marítimo” del ejército estadunidense contra el buque petrolero venezolano asaltado la semana pasada, tras asegurar que dichas acciones son parte de las “provocaciones y agresiones” que Washington “ha escalado a partir de su desproporcionado e injustificado despliegue militar en el mar Caribe”.
El presidente colombiano Gustavo Petro abogó por el respeto de la soberanía de Venezuela e insistió en que en la vecina nación hay una “dictadura”.
Afirmó que el presidente Nicolás Maduro no da órdenes al ejército colombiano, luego que el mandatario venezolano destacó antier y reiteró ayer la necesidad de que los ejércitos de ambas naciones unan esfuerzos para proteger los recursos naturales y la independencia de Sudamérica.
Irán denunció las “acciones ilegales” de la Casa Blanca “basadas en el uso de la fuerza y el continuo acoso” contra Caracas.
Un presunto líder de la banda Tren de Aragua, Héctor Rusthenford Guerrero Flores, un venezolano de 42 años, fue acusado en Nueva York de presunta conspiración y apoyo a terroristas, anunció el fiscal estadunidense Jay Clayton.
El acusado sigue prófugo y el Departamento de Estado estadunidense ofrece recompensas de hasta 5 millones de dólares por su arresto, detalló la dependencia en un comunicado.