Nota publicada: 2025-05-09
Hermosillo, Sonora, 9 de mayo de 2025.- En un acto que conjuga memoria, identidad y compromiso con la cultura universitaria, la rectora María Rita Plancarte Martínez, encabezó la ceremonia de entrega oficial de la restauración del mural Andamios en Movimiento, pieza icónica de la Universidad de Sonora que, a 28 años de su creación, ha sido recuperada como parte del patrimonio artístico de la institución.
Durante el evento, la rectora subrayó que, más allá de construir nueva infraestructura, el verdadero reto para las universidades es conservar su legado material y simbólico.
“Esta obra es una expresión profunda de nuestra identidad y de la importancia que la Universidad otorga a las artes. Recuperarla no es solamente una acción estética, es un acto de memoria y compromiso con las generaciones presentes y futuras”, afirmó.
Plancarte Martínez destacó la vigencia de los temas abordados en el mural, como la migración, la frontera y los conflictos sociales que aún marcan a la región.
“Es impresionante cómo, casi tres décadas después, los mismos temas siguen hablándonos con fuerza. El arte tiene esa capacidad de mantenerse vivo y dialogar con su tiempo”, expresó.
Laboratorio de restauración artística
Ubicado en la esquina de la Calle de la Sabiduría y la Avenida Sonora, justo frente a la Plaza del Estudiante, en el campus Hermosillo, este mural fue concebido por el artista sonorense Alberto Morackis y creado en 1997, junto con el Grupo Gangstlacuilo, como parte del programa En primavera florecen los murales, impulsado en su momento por el entonces rector Jorge Luis Ibarra Mendívil.
Tras décadas de exposición al sol y al paso del tiempo, la obra presentaba un deterioro considerable, que motivó una intervención especializada. El proceso fue liderado por el académico Carlos Sergio Ríos Villegas, en colaboración con Renee Abril Enríquez Saavedra y Roberto Daniel Carretas Chávez, egresados de la Licenciatura en Artes Plásticas.
Carlos Ríos explicó que la restauración fue un desafío técnico y conceptual, pues aproximadamente el 50% del mural había desaparecido.
“Tuvimos que acudir al Archivo General Universitario para consultar fotografías originales, reconstruir elementos faltantes y restaurar aquellos que aún podían rescatarse. Fue un verdadero laboratorio de restauración contemporánea”, señaló.
Entre las técnicas utilizadas se incluyó la consolidación del repello, la reintegración cromática, la inyección de grietas y el tratamiento especializado para conservar los efectos del intemperismo, visibles en los tonos azulados, verdosos y grisáceos del mural.
Un mural con profundo simbolismo socialLa escena del mural se desarrolla en una frontera, marcada por un muro divisorio que forma parte de la identidad regional.
“¿Por qué Andamios en Movimiento? Porque la construcción de esta sociedad ocurre dentro de esos andamios; son los que sostienen a la mujer descarnada que se está formando”, explicó el académico.El personaje central —una mujer sin piel— representa a la sociedad en gestación. De ella nace una figura sin rostro ni forma, símbolo de la nueva humanidad. También, dijo, aparece una estructura en construcción, donde un cerebro cuelga de lazos y un corazón permanece al margen, evidenciando que ni la razón ni el sentimiento están siendo utilizados en esa nueva edificación.
Compartió que en los extremos del mural aparecen figuras que simbolizan la dualidad: un hombre y una mujer. Ella porta el símbolo de la anarquía, un micrófono, un mouse y cascabeles de pascola, además de una máscara que representa la alegría. Él, por su parte, representa a un punk: lleva un rostro triste, una macana como símbolo de represión, cascos de la ONU con impactos de bala y un morral con el símbolo de la diversidad.
Ríos Villegas añadió que hay múltiples elementos regionales integrados: un atardecer, cerros característicos de la frontera, y botellas de cerveza y caguamas tiradas, representando la cultura del desecho.
Reencuentro con el aprendizaje universitarioRenee Abril Enríquez Saavedra, egresada en 2011, compartió que participar en la restauración fue un reencuentro con sus aprendizajes universitarios y con el valor del arte público.
“Fue un verdadero laboratorio del color. Me di cuenta de todo lo que aprendí aquí y también de lo que he seguido aprendiendo después. A los estudiantes les diría que nunca dejen de explorar lo técnico, porque es una herramienta poderosa”, comentó.
Tres etapas de un muro universitarioAriel Silva Encinas, coordinador del Patrimonio Cultural de la Universidad y jefe del Museo Regional, contextualizó el mural dentro de una tradición muralista de más de cuatro décadas en ese mismo muro.
Recordó que en 1985 se pintó ahí una marcha de obreros y campesinos, como reflejo de una universidad revolucionaria. En los años noventa, con el auge del movimiento punk y estudiantil, surgieron expresiones gráficas de fuerte contenido social, como Andamios en Movimiento.
“La tercera etapa que vivimos hoy es la de la restauración y profesionalización de las artes plásticas, donde artistas formados en esta casa de estudios, como Carlos Ríos y su equipo, rescatan y resignifican el arte mural universitario”, expresó.
Reconocimiento institucionalDurante el evento de entrega oficial de la restauración del mural, realizado la tarde del 8 de mayo, la rectora agradeció el compromiso del equipo de restauración y de las autoridades que respaldaron el proyecto.
“Esta obra ha sido vista por 28 generaciones de estudiantes, y ahora otras más podrán seguir recibiendo su mensaje. Confiamos en que este impulso al arte universitario continúe como una forma de honrar nuestra historia y proyectar nuestro futuro”, concluyó Plancarte Martínez.
En el corte del listón participaron también el director Administrativo del campus Hermosillo, Joel Enrique Espejel Blanco; la coordinadora general de la Facultad Interdisciplinaria de Humanidades y Artes, María Guadalupe Alpuche Cruz; la jefa del Departamento de Bellas Artes, Flor del Carmen Herrera Navarro, y el coordinador del programa de Artes Plásticas, Darío Ruiz Rosas.